Descripción
En uno de los canecillos del muro norte del exterior del ábside se representa
al profeta Daniel arrodillado tocando con sus manos la parte inferior de
las fauces de dos minúsculos leones que están en la parte superior de la
pieza y que apoyan sus garras delanteras en los hombros del profeta. Éste
lleva barba, viste túnica y capa. En el canecillo siguiente por el norte,
se representa a un ángel sentado. Posiblemente se trata del ángel que le
ayudó en la primera condena al foso, narrada en el pasaje bíblico Daniel
6. El siguiente canecillo por el sur presenta a un personaje lanzando una
bola. Posiblemente es el propio Daniel arrojando la bola de resina y pelos
con la que mato a la serpiente que adoraban los babilonios y que fue una
de las causas de la conspiración contra él que le llevó por segunda vez
al foso en el episodio bíblico Daniel 14. Este canecillo parece una pieza
nueva o fuertemente modificada, al igual que el cercano de un personaje
llevando un libro, que posría ser el propio Daniel. Hay que tener en cuenta
que en 1356 la catedral sufrió las consecuencias de un fuerte terremoto
y que en el siglo XIX se llevó a cabo una importante restauración. |