Descripción
En el capitel del interior del lado sudeste del transepto se representa
la escena de la condena del profeta Daniel al foso de los leones. El profeta
está de pie el centro de la cara principal de la pieza, con las manos juntas,
rezando. Viste túnica larga y tiene una cabeza desproporcionadamente grande.
En su rostro destacan unos voluminosos ojos y sus carnosos labios. A cada
lado tiene sendos leones, que tienen sus inmensas cabezas en las esquinas
superiores del capitel. Sus bocas abiertas tienen, asimismo, un descomunal
tamaño. No hay elementos iconográficos que permitan determinar si la escena
representada corresponde a la condena narrada en el episodio de Daniel
6 ó en Daniel 14. La actitud orante del personaje central nos permite afirmar
con seguridad que estamos ante el profeta Daniel. En el capitel del lado
noreste del transepto, colocado de forma simétrica al de Daniel, se representa
la Caída, el momento en el que se comete el Pecado Original. Bougoux comenta, en relación con esta pieza, que la contraposición Daniel-Abraham con Adán y Eva presenta el paradigma de la obediencia frente a la desobediencia. En el caso de esta iglesia dicha contraposición resulta evidente, pues Eva, que recibe la manzana de la serpiente a la vez que se la ofrece a Adán, está en el centro de la cara principal (Adán está en la esquina), poniendo de manifiesto su contraposición con Daniel, que ocupa la misma posición del capitel opuesto y simétrico. |